martes, 8 de enero de 2013

Planetary

Yo me leí la versión en dos volúmenes, pero la portada de la versión absolute es mucho mejor.

Tras casi 2 años de búsqueda por las diferentes bibliotecas del multiverso, finalmente encontré Planetary de Warren Ellis (Transmetropolitan, Global frecuency) completa. La verdad, con todo ese tiempo de búsqueda, lo muchísimo que me gustó Transmetropolitan y las alabanzas recibidas por la red y en mi tienda habitual, el hype no era para menos. ¿Estuvo a la altura de las expectativas o supuso el primer jarrazo de agua fría del año? La respuesta después del salto.


Como ya comenté en Global frecuency, Planetary es la historia de una organización que se encarga de casos fuera de lo común, siendo siempre un equipo de tres: Jakita Wagner, The drummer y Elijah Snow (el nuevo, lo que lo hace estar tan perdido como nosotros ante lo que sucede a su alrededor y será el primero con el que nos sintamos identificados). A partir de ahí tendremos un homenaje constante a la cultura pop del último siglo, pero siempre de forma sutil. James Bond, Hulk, Dracula, Wonder Woman, Green Lantern, Sherlock Holmes... excepto el último, todos ellos aparecen sin decir su nombre o bajo seudónimo, pero no dudo en que los más fans de los mismos sean capaces de reconocer su presencia y sacar una sonrisa ante los mismos (cuando vi a Jack Carter sin gabardina me quedé como un idiota sonriendo durante un par de minutos enteros).

Desafortunadamente, esto es un arma de doble filo. Por mucho que los más enterados de esta subcultura estarán encantados con el cómic, Planetary perderá gran parte de su valor si el lector es inexperto en esta materia o pasa bastante de los cómics en general. Aún así, sea o no el lector asiduo a este medio se dará cuenta que posee otro error, pues el mayor problema de Planetary es su ritmo. Durante las primeras 130 páginas pasan cosas pero no existe una trama: los personajes van, hacen lo que hacen y se van. Puede haber alguna referencia a personajes de otros capítulos pero nada del otro mundo. Entonces, en el capítulo seis la cosa empieza a mostrar algo parecido a una trama y un antagonista, pero aún así hasta el final del primer volumen las cosas van muy a su ritmo: se nos insinúan cosas del pasado, aparecen nuevos personajes pero nada más, la trama en sí no se mueve. El único momento en el que realmente notamos avance es cuando termina el volumen, pues el capítulo 12 además de ser apoteósico es una declaración de principios, un puñetazo sobre la mesa que significa "ojo, que a partir de ahora las cosas cambiarán"... y entonces empiezan los flashback.

Casi la mitad del segundo tomo son un montón de Flashback sobre la historia de Planetary en general y la de Elijah en particular, lo cual nos aporta mucha información interesante pero hace que la trama del presente avance a ritmo de pulga... y en el momento que lo hace suceden tantas cosas y en tan poco tiempo que la cara de "¿ya está?" que se nos queda es cuanto menos curiosa. Dicho de otro modo: la trama central es una excusa para nutrir la serie con todos los flashback e historias sueltas que hay. Sí, como ya dije antes es un homenaje a la cultura pop del siglo pasado en toda regla, pero si algo he aprendido de historias como Supreme o Top ten (las dos de Alan Moore, curiosamente) es que hay formas mejores de hacer esa clase de cosas.

El dibujo corre a cargo de Jonh Cassaday. Ni una queja al respecto.

A parte de esto, Planetary cuenta con tres spin off: Tierra oculta (crossover con Superman, Batman y Wonder Woman donde Planetary es una organización maligna),  Gobernando el mundo (crossover con The authority) y Noche en la tierra (crossover con Batman). Si quieres leerlos espera como mínimo a haber terminado el primer tomo, pues pueden joderte cierto detalle de la trama que se descubre al final del mismo, aunque ya aviso que no son nada del otro mundo ninguno de los tres, siendo el mejor Tierra oculta pero aún así no destaca precisamente en nada.

Expansiones a parte, Planetary es una serie muy recomendable para todo fan de los cómics que esté dispuesto a perdonarle sus fallos de ritmo... y que tenga mucho dinero disponible, pues hacernos con ella al completo nos costará 49,50 en edición Absolute o 52 euros comprando los 2 volúmenes de 26 por separado. Vamos, que es una pasta, siendo este el principal motivo que descarte el hacerme con ella en los próximos años.

Edit. Enlace a la posterior Relectura.

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